jueves, 3 de abril de 2014

Santa María de Moreruela. La arquitectura en la acuarela. 270. 272


           Decimotercera clase. Tercer curso.        Monasterio de Moreruela



          En las cercanías de las Lagunas de Villafáfila, en la provincia de Zamora, saliendo de la nacional 630, encontramos un paraje con unas ruinas antaño famosas, las del Monasterio de Santa María de Moreruela. Actualmente en ruinas, aunque planteada su reconstrucción parcial. Monasterio Cisterciense, quizá el primero en España, del siglo XII. 
          La foto corresponde al presbiterio, desde el deambulatorio que rodea el ábside. Lo que se ve, románico. Por las columnas se percibe la magnitud de la iglesia. 



Santa María de Moreruela.
Foto: Hilario de las Moras. 

          Vamos a trabajar un poco la arquitectura en la acuarela. La iglesia es muy sobria, como corresponde al cister. El sol penetra entre sus muros destruidos y les da una luminosidad impropia de este templo románico. 

          1. Haré un dibujo cuidado.


          El que pintemos un resto arquitectónico no implica el que el dibujo previo sea perfecto. Es más, a veces ni se busca ni merece la pena, pues cuanto más real, menos espontánea es la acuarela. Es decir, el valor como acuarela no le viene por su fidelidad al modelo, sino por otros parámetros más sutiles y artísticos. 
            Pero yo, en este caso me acercaré a la realidad utilizando la regla. 


Imagen 1. Hilario de las Moras


UN APUNTE RÁPIDO

          a. Me apetece hacer un trabajo paralelo, antes del definitivo.

          Dejando descansar el dibujo, he realizado otro dibujo a mano alzada y he comenzado a hacer una acuarela rápida. He aquí la primera mancha. 
             Como puede apreciarse son tonos cálidos. Desde el naranja al siena tostado, pasando por el alizarina. Todos ellos muy diluidos. 

             
Apunte. Imagen a. Hilario de las Moras. 


          b. Nos dedicamos al fondo.

          Utilizando los mismos colores, intensifico y voy terminando la pared del fondo, con sus arcos de medio punto y sus óculos escondidos. Los colores han sido el naranja winsor, el rojo cadmio y el siena natural, para las zonas más luminosas. Para los contrastes, el alizarina con azul ultramar y a veces unido al siena tostado


Apunte. Imagen b. Hilario de las Moras. 

          c. Seguimos con la columna central.

          Si deseamos un trabajo un poco minucioso de la columna habrá que redibujar al menos los principales motivos dentro del capitel y de la basa con un pincel más fino. Como es prácticamente el motivo, de daremos un poco de importancia. Los colores son los mismos, pero he añadido algo más de naranja para darle un poco más fuerza que al fondo, de modo que resalte. 


Apunte. Imagen c. Hilario de las Moras. 

           d. Vamos al primer término.


           Este primer término es como un hueco por el que vemos el espacio del presbiterio. Está haciendo como de marco que focaliza nuestra mirada al interior, por ello le daremos poca importancia en cuanto al detalle, pero sí forzaremos su oscuridad. 


Apunte imagen d. Hilario de las Moras

           Colores utilizados para esta zona, siena tostado con pizcas de alizarina o de azul ultramar o ambos por la izquierda y de siena tostado con naranja o ozul ultramar por la derecha. 
            Casi está terminada. 
            Por ahora, creo que debo dejar la acuarela para que mirada con ojos nuevos el próximo día sea capaz de darle los últimos toques, que es añadir aquí, quitar allá, intensificar ésto o lo de más allá. Me faltan también las sombras del suelo. 

          5. Finalizamos.

          he retocado algunas cosas, que está a la vista. 
          El resultado es normal. Lo firmo.
          Creo que por ahora se queda en este tamaño, aunque mi pretensión inicial era hacerla con más detalle y a mayor tamaño. Otra vez será.


Santa María de Moreruela. 270.  Hilario de las Moras.
Acuarela. 25 x 25.


          y 2. He terminado la acuarela que inicié al comienzo de la lección.

          El resultado es más o menos igual, únicamente veo diferencia en que refleja más la realidad de la iglesia en cuanto a sus medidas. Queda más esbelta la estructura. En cuanto al trabajo de acuarela, no noto diferencias significativas. Aquí muestro el final del trabajo. De aquí podemos sacar alguna conclusión. El valor de la acuarela no es mayor porque refleje fielmente las "medidas" del edificio, sino por otras cualidades más relacionadas con el trabajo de la acuarela. Naturalmente no tenemos que llevar ésto al extremo.



Santa María de Moreruela dos. 272. Hilario de las Moras
Acuarela. 52 x 38



                      TRABAJOS RECIBIDOS


          Ya he comenzado a recibir vuestros trabajos. Son fantásticos. 


Mercedes Forasté. 2014. 


Antonio Conejero. 2014. 

Camille Downes. 2014. 


Francisco Cucharero. 2014. 

2 comentarios:

  1. Muy bien explicado todo el proceso de este tema arquitectónico. ¡ Estupendo profesor !

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  2. Hola, Justo.
    Un poco raro me parece a mí este tema, sobre todo por tratarse de interior, con poca luz y colores muy afines. Pero bueno, creo que tenemos que ir tocando todos los palillos para ir aprendiendo. Un saludo.

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